¿Para qué sirve el filtro de aire del coche? Todo lo que debes saber

Para mantener nuestro vehículo en un estado óptimo es necesario contar con un filtro de aire en buenas condiciones. Revisarlo y cambiarlo con regularidad será buena opción para no dañar el motor y seguir disfrutando de una mejor conducción. En el mercado existen varios tipos con diferentes formas, materiales y modos de filtrado. Según sus características, el filtro de aire del coche podrá influir de una manera u otra en su eficiencia y rendimiento.

¿Qué es el filtro del aire del coche?

El filtro de aire es importante para el automóvil al ser responsable de garantizar un aire puro a los cilindros. Su misión es ayudar a que la mezcla con el carburante esté limpia y libre de residuos. Es por ello que un mantenimiento regular impedirá que las diferentes partes del motor estén expuestas a la contaminación externa. Y es que si esto sucediera podrían acabar con daños incuantificables. Actualmente hay diferentes tipos en función de varios factores como tamaño, modo de funcionar y material. Así, los puedes encontrar en malla de acero, foam, aceite, algodón, agua o papel. En Talleres Adolfo Trigueros encontrarás profesionales que te explicarán todo lo que debes saber del filtro de aire.

No hay que confundir este filtro de aire, dirigido al motor, con el encargado de purificar el interior del vehículo. Y es que este es el que garantiza un habitáculo libre de suciedad, tierra o polen, imprescindible para pasajeros alérgicos. Unos síntomas que pueden afectar a la conducción, disminuyendo su capacidad de atención y conducción.

¿Para qué sirve el filtro del aire del coche?

Las ventajas de contar con un buen filtro de aire del coche que proporcione aire limpio son infinitas. Porque no solo tenemos un motor con mejor rendimiento, sino que evitamos problemas mecánicos y tenemos un lubricante más limpio. Y para ello la clave está en el mecanismo de combustión de la mezcla entre aire y carburante. Una tarea esencial en cuyo proceso cumple un papel muy importante el filtro de aire del coche. Además, hay que tener en cuenta que la última tecnología en automoción cada vez requiere mecanismos más precisos y sofisticados. Todo para lograr mayores cotas de eficiencia, rendimiento y sostenibilidad con bajo consumo y emisiones contaminantes.

Tener un filtro sucio impedirá un correcto paso del aire, modificando la mezcla final de combustión creada por el fabricante. Esto provocaría más consumo, perjudicando a su vez a la parte electrónica del automóvil. Por pequeña que sea la cantidad de aire bloqueado por suciedad se estará forzando la electrónica del motor. Un sobreesfuerzo que el vehículo lleva a cabo para obtener la composición perfecta de carburante, empleando para ello más cantidad.

En definitiva, contar con un filtro de aire en estado óptimo ayudará a alargar la vida del motor del vehículo. Y es que son piezas muy delicadas que es mejor tratar con precaución. Con el paso del tiempo, su baja tolerancia para filtrar bien el aire puede hacer que aparezcan distintas obstrucciones. Arena, polvo y otras partículas pueden causar problemas internos y desgastar la mecánica y algunas piezas con más rapidez. Disminuyendo la entrada de aire también se quema más combustible, aumentando la resistencia interna del automóvil. Un proceso que nos hace expulsar más contaminación, que no beneficia ni al medio ambiente ni a nuestra próxima revisión de ITV.

¿Cuándo cambiar el filtro de aire del coche?

Por suerte, sustituir el filtro de aire del coche no es muy costoso para los problemas que podría ocasionar. Se trata de una pieza asequible para los conductores por lo que merece la pena invertir en su renovación regularmente. Todo dependerá del estilo de conducción, uso que le demos al coche, condiciones a las que esté expuesto… Por norma general, el filtro de aire se cambia cada 15.000 km o un año, lo que antes sea. Aunque es verdad, que siempre aconsejamos seguir las indicaciones de los fabricantes, ya que otros pueden recomendar cambiarlo cada 20.000 km.

Un truco muy fácil para saber si nuestro filtro de aire necesita un cambio es observar su aspecto. Para ello solo tendremos que compararlo con un filtro nuevo y ver su color. Normalmente tienden a oscurecerse por la suciedad volviéndose un tono amarillento, marrón, grisaceo o negro. Esto dependerá del tipo de material y composición. Pero si estamos en un ambiente muy contaminado, lo más lógico es que el filtro sea cambiado con más asiduidad. Elegir el filtro adecuado puede ser complicado, pero con el asesoramiento de los profesionales de Talleres Adolfo Trigueros no tendrás problemas.